Y ahora comprende la vida del estudiante-laburante o el laburante-estudiante, el orden nunca alteró los factores. No hace muchos meses se convirtió en una de ellos y su tiempo se vio minimizado; tantas preocupaciones que supo tener y tiempo para maquinar se transformaron en otros tipos de problemas, ej: si ahorra, se puede comprar tal cosa... es una manera de crecer. Y en algún punto el trabajo se volvió también una prioridad, a veces dejando un poco atrás su carrera, esa que tanto ama y tanto la hace sufrir. Las horas de sueño se le volvieron sagradas, la costumbre de dormirse temprano y madrugar al otro día, y la satisfacción de sentirse útil cada día que te levantas, llueva, haga frío, haga calor ; aunque sus jefes no lo valoren o les de igual lo que a ella le pase o le deja de pasar. Nota aparte: tanto madrugar de lunes a viernes empezó a despertarse temprano sábados y domingos. No fue nada fácil ese primer mes, todo era nuevo para ella, los errores de los pri...