"Y sigo esclava de sus besos, y sigo presa de mis miedos,
y sigo sin saber porque razón, sigue él en mi interior".
Debería adjuntar varias canciones en este blog, pasa que la vida es así, todo no se puede.
De mi que puedo llegar a decir, ah si, no me hace bien tenerlo tan lejos y sin saber nada de él, ¿cuando voy a volver a sonreír? cuando lo olvide.
Mientras tanto voy a seguir descargando mis instintos sexuales en el locutor Juani Martínez, por cierto Débora, que bajo que caíste.
Todo el tiempo morís de ganas de cruzartelo, hablar y solucionar las cosas, qué débil, seguramente a él no le importa, hasta serías capaz de ofrecerte con tal de volver, estas completamente loca, pero lo razonas y no lo buscas pero... te morís de ganas. Sin tener en cuenta, que lo ves en todos lados, ves sus manos, su pelo, su altura, confundís a chicos con él ; y aunque no lo quieras admitir no hay nadie en el mundo que lo pueda reemplazar, tampoco queres que alguien lo haga y eso es triste.
Por suerte, vas a empezar a estudiar y crees que vas a poder olvidarlo como él hizo con vos. ¿Sos tan valiente? ¿Podrá tu carrera mantener tu mente ocupada?
Entonces vas a seguir llenando la cabeza con libros, series, ejercicios de inglés, pensando que algún día vas a ser feliz.
"Con una daga en el corazón, pretendes olvidar... "