Saber que es un día hermoso sin saber salido, parece extraño pero no lo es.
El verano tiene eso, los días son soleados y no hace falta experimentarlo, solo con mirar por la ventana se puede hasta saber cuántos grados hacen, me fascinan los días soleados pero esta época no.
Si tuviera que decir porque no me gusta esta estación sería:
1) No tengo nada para hacer.
2) No tengo pileta.
3) No tengo empleo.
4) No me voy de vacaciones en enero.
5) Estoy sola, se fueron todos.
Digamos que entre esas opciones esta la justificación de porque quiero que sea invierno, aparte amo caminar en invierno, tomarme el transporte público, es decir el colectivo, abrigarme, usar bufanda y guantes. Y aunque no lo crean extraño a la facultad.
Sin embargo, cuando estudio tengo ganas de no hacer nada como ahora y en este preciso momento escribo para invertir en algo el tiempo, es el colmo.
Insisto si hay algo que me encanta es tener el tiempo ocupado en cualquier cosa, estaba pensando que me tendría que haber comprado una versión actualizada de Otelo (William Shakespeare) la que leí esta en 'gallego' y hay palabras antiguas, totalmente desconocidas para mi vocabulario que no es extenso pero si útil.
Patente pendiente: finalizar de leer The Reader- Bernhard Schlink es el libro que más años tarde en leer, vagancia veraniega supongo. Capaz que me reciba de traductora y no lo termine de leer, en realidad no sé porque no lo termine es excelente.
Hay partes de mi que nunca voy a entender, el entendimiento entre personas es bastante complicado, hay veces que ni uno mismo se entiende, por lo menos a mi me ocurre.
Me gusta admitir todo lo que se cruza por la mente, por algo será... por algo debe ser esta necesidad de descargar toda duda que me surge o toda afirmación.
Hoy mi día empezo antes de las 9am de a poco estoy volviendo a ser 'persona', si me sentía zombie por levantarme a las 15 y comer sin ganas, vivir sin ganas.
'No sé lo que quiero pero sé lo que no quiero'. diría A. Calamaro, voy a seguir viviendo, hay una reflexión que quizás me pase como los libros que nombre, es tan difícil sobre lo que quiero hablar que no estoy segura de poder terminar de escribirlo, lo voy a intentar.
Y antes de decidirme si continuo leyendo los libros antes nombrados, pido: ¡volve invierno!
En la siguiente foto se puede apreciar mi anormalidad.
De paso dejo una foto actual, hace tiempo que no escribo ni actualizo.
El verano tiene eso, los días son soleados y no hace falta experimentarlo, solo con mirar por la ventana se puede hasta saber cuántos grados hacen, me fascinan los días soleados pero esta época no.
Si tuviera que decir porque no me gusta esta estación sería:
1) No tengo nada para hacer.
2) No tengo pileta.
3) No tengo empleo.
4) No me voy de vacaciones en enero.
5) Estoy sola, se fueron todos.
Digamos que entre esas opciones esta la justificación de porque quiero que sea invierno, aparte amo caminar en invierno, tomarme el transporte público, es decir el colectivo, abrigarme, usar bufanda y guantes. Y aunque no lo crean extraño a la facultad.
Sin embargo, cuando estudio tengo ganas de no hacer nada como ahora y en este preciso momento escribo para invertir en algo el tiempo, es el colmo.
Insisto si hay algo que me encanta es tener el tiempo ocupado en cualquier cosa, estaba pensando que me tendría que haber comprado una versión actualizada de Otelo (William Shakespeare) la que leí esta en 'gallego' y hay palabras antiguas, totalmente desconocidas para mi vocabulario que no es extenso pero si útil.
Patente pendiente: finalizar de leer The Reader- Bernhard Schlink es el libro que más años tarde en leer, vagancia veraniega supongo. Capaz que me reciba de traductora y no lo termine de leer, en realidad no sé porque no lo termine es excelente.
Hay partes de mi que nunca voy a entender, el entendimiento entre personas es bastante complicado, hay veces que ni uno mismo se entiende, por lo menos a mi me ocurre.
Me gusta admitir todo lo que se cruza por la mente, por algo será... por algo debe ser esta necesidad de descargar toda duda que me surge o toda afirmación.
Hoy mi día empezo antes de las 9am de a poco estoy volviendo a ser 'persona', si me sentía zombie por levantarme a las 15 y comer sin ganas, vivir sin ganas.
'No sé lo que quiero pero sé lo que no quiero'. diría A. Calamaro, voy a seguir viviendo, hay una reflexión que quizás me pase como los libros que nombre, es tan difícil sobre lo que quiero hablar que no estoy segura de poder terminar de escribirlo, lo voy a intentar.
Y antes de decidirme si continuo leyendo los libros antes nombrados, pido: ¡volve invierno!
En la siguiente foto se puede apreciar mi anormalidad.
De paso dejo una foto actual, hace tiempo que no escribo ni actualizo.
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